Un café
humeante deja ver en su reflejo la soledad que me permite planear
el día que viene, trabajo y más trabajo por algo dicen que los paisas
somos gente "muy trabajadora y muy pujante".
Todos los días la mayoría de las personas de
la clase trabajadora en Medellín se levantan muy temprano en la mañana, acostumbradas
ya a desplazarse a sus lugares de trabajo en medio de los trancones de la hora
pico y gente apresurada.
Soy Paula y toda mi vida ha transcurrido en esta ciudad que cada
vez crece más y más; paradójicamente en un espacio relativamente pequeño. Esta
urbe caracterizada por gente muy alegre y dispuesta está rodeada de montañas
que desde lo alto ven como el concreto las empieza a mirar de frente.
Medellín está catalogada entre las ciudades más innovadoras del
mundo y esto la hace un valioso patrimonio para su mayor contenedor que es
Colombia, excelente en turismo y bellas personas todos los turistas quieren
conocerla y llevarse un pedacito de ella en el corazón.
Una ciudad que años atrás fue protagonista de los escenarios más
violentos que ha tenido Colombia, ahora es el epicentro de muchas acciones en
pro del desarrollo urbano, a cualquier paisa lo pondría feliz este tipo de noticias,
lo llenaría de orgullo ver a su cuidad creciendo y dando ejemplo como nos
enseñaron, sin embargo una característica del paisa o de alguna estirpe que existió
años atrás es la de ser preguntón, por eso cabe preguntarse: si una ciudad que
crece tanto y a pasos agigantados se podría decir está haciendo bien las cosas,
con el siguiente contraste no pretendo manifestar una posición sino más bien
llamar a la reflexión y a que el lector de este blog saque sus propias
conclusiones, personalmente me siento muy orgullosa de mi cuidad y creo que en
el proceso de mejoramiento de cualquier cosa debe haber falencias, pero también
pienso que se debe trabajar en función de esas falencias para mejorar y no
"hacer huecos pa' tapar otros".
En el proyecto de desarrollo urbano están consignadas algunas
obras que mejoran la parte visual de nuestra ciudad, entre ellas está el parque
bicentenario que ya fue entregado y está ubicado en el barrio Boston uno de los
tantos barrios donde se han desarrollado tantas historias que tiene esta ciudad,
el parque cuenta con una delas tres pantallas de agua existentes en Latinoamérica
y con un espacio que cumple con todos los propósitos por los que la administración
de la cuidad quiere trabajar en cuanto a espacio público, sin embargo cabe
preguntarse cuál es la historia que subyace a la construcción del lugar, cuales
son los efectos de tal desarrollo y si los hay ¿son positivos o negativos?
ustedes juzgaran, veamos.

Juan Antonio Sánchez | Más de 1.500 personas asistieron a la inauguración del Parque Bicentenario, especialmente para ver la pantalla de agua que se instaló allí, primera en Latinoamérica y tercera en el mundo.
La gente ya disfruta el Parque Bicentenario
LA ENTREGA DE la primera etapa del parque, obra motivada en la celebración de los 200 años de la independencia, abre el camino hacia la transformación de las comunas 8, 9 y 10.
Lo único que le falta ahora a Sara es conseguir el novio, pues ya tiene a dónde salir a caminar con él: el Parque Bicentenario, que el sábado fue entregado a la comunidad por el alcalde de Medellín, Alonso Salazar.
"Y no cualquier novio, porque este parque amerita uno bien papacito para poderlo sacar", expresa Sara, quien madrugó a ver esta gran obra que suplirá grandes necesidades.
Ella manifiesta que de ahí para arriba, donde hay barrios como Caicedo, La Toma y La Sierra, para mencionar solo los más importantes, no hay un solo lugar en el que las personas puedan encontrarse con los amigos, con los novios o salir a pasar una tarde o un día con la familia.
Afirma que el sector quedó maravilloso, pues antes era muy deprimido, con casas muy viejas.
"Cuando se termine, pues nos han dicho que esta es la primera etapa, le va a dar mucha vida a esa comuna".
Sara esperaba, junto a su prima y el novio de ésta, la inauguración para ver prendida la pantalla de agua.
"Nos dijeron que es la única en Latinoamérica y la tercera en el mundo. Tiene que ser muy bonita", expresó.
Mauricio Bolívar, habitante del sector, en la parte baja de Boston, el sábado estuvo desde la tarde disfrutando de ese nuevo espacio y esperando el estreno.
Sentado en uno de los muros que delimitan el escenario, acudió para cerciorarse del cambio y de la transformación que había sufrido el sector con la construcción del Parque Bicentenario.
Nunca había estado por estos lados, a pesar de quedar tan cerca de su casa.
"Comentaban que era inseguro y que socialmente era un sector muy deprimido, por eso no me atraía", dijo.
Para Mauricio, esta obra es importante desde el punto de vista de la inclusión y del dinamismo que va a adquirir la zona.
"Seguramente las propiedades se van a valorizar más y los establecimientos públicos van a tener un mayor dinamismo", calculó.
Lo que todos esperaban
Hasta que llegó la hora esperada, las 7:00 de la noche, para ver en todo su esplendor la pantalla de agua, de la que todos hablan por estos días.
Y como la obra está motivada en la celebración del bicentenario del grito de la independencia, la primera imagen no podía ser otra que la del libertador, Simón Bolívar, seguida de algunas estampas que representan los 200 años de la independencia de Colombia.
Imágenes que fueron acompañadas por los sonidos de la Banda Sinfónica de la Red de Escuelas de Música de Medellín, que con sus acordes siguió el montaje de figuras y luces en la cortina de agua.
Una moderna pantalla en la que la comunidad podrá ver películas, presentaciones, videos y figuras con láser, con el mejor teatro al aire libre.
Esta primera etapa también contempló el acondicionamiento de 6.000 metros cuadrados de espacio público y teatro al aire libre.
La segunda etapa, dice la gerente (e) de la Empresa de Desarrollo Urbano (EDU), María Eugenia Ramos, se dedicará a otra parte de la historia, la de la violencia de nuestra ciudad.
"Vamos a tener la Casa de la Memoria para hacerles un homenaje permanente a las víctimas, con un centro documental para que nunca esta ciudad repita la violencia que hemos tenido", señaló la funcionaria.
"Y no cualquier novio, porque este parque amerita uno bien papacito para poderlo sacar", expresa Sara, quien madrugó a ver esta gran obra que suplirá grandes necesidades.
Ella manifiesta que de ahí para arriba, donde hay barrios como Caicedo, La Toma y La Sierra, para mencionar solo los más importantes, no hay un solo lugar en el que las personas puedan encontrarse con los amigos, con los novios o salir a pasar una tarde o un día con la familia.
Afirma que el sector quedó maravilloso, pues antes era muy deprimido, con casas muy viejas.
"Cuando se termine, pues nos han dicho que esta es la primera etapa, le va a dar mucha vida a esa comuna".
Sara esperaba, junto a su prima y el novio de ésta, la inauguración para ver prendida la pantalla de agua.
"Nos dijeron que es la única en Latinoamérica y la tercera en el mundo. Tiene que ser muy bonita", expresó.
Mauricio Bolívar, habitante del sector, en la parte baja de Boston, el sábado estuvo desde la tarde disfrutando de ese nuevo espacio y esperando el estreno.
Sentado en uno de los muros que delimitan el escenario, acudió para cerciorarse del cambio y de la transformación que había sufrido el sector con la construcción del Parque Bicentenario.
Nunca había estado por estos lados, a pesar de quedar tan cerca de su casa.
"Comentaban que era inseguro y que socialmente era un sector muy deprimido, por eso no me atraía", dijo.
Para Mauricio, esta obra es importante desde el punto de vista de la inclusión y del dinamismo que va a adquirir la zona.
"Seguramente las propiedades se van a valorizar más y los establecimientos públicos van a tener un mayor dinamismo", calculó.
Lo que todos esperaban
Hasta que llegó la hora esperada, las 7:00 de la noche, para ver en todo su esplendor la pantalla de agua, de la que todos hablan por estos días.
Y como la obra está motivada en la celebración del bicentenario del grito de la independencia, la primera imagen no podía ser otra que la del libertador, Simón Bolívar, seguida de algunas estampas que representan los 200 años de la independencia de Colombia.
Imágenes que fueron acompañadas por los sonidos de la Banda Sinfónica de la Red de Escuelas de Música de Medellín, que con sus acordes siguió el montaje de figuras y luces en la cortina de agua.
Una moderna pantalla en la que la comunidad podrá ver películas, presentaciones, videos y figuras con láser, con el mejor teatro al aire libre.
Esta primera etapa también contempló el acondicionamiento de 6.000 metros cuadrados de espacio público y teatro al aire libre.
La segunda etapa, dice la gerente (e) de la Empresa de Desarrollo Urbano (EDU), María Eugenia Ramos, se dedicará a otra parte de la historia, la de la violencia de nuestra ciudad.
"Vamos a tener la Casa de la Memoria para hacerles un homenaje permanente a las víctimas, con un centro documental para que nunca esta ciudad repita la violencia que hemos tenido", señaló la funcionaria.
fuente:
(http://www.elcolombiano.com/BancoConocimiento/L/la_gente_ya_disfruta_el_parque_bicentenario/la_gente_ya_disfruta_el_parque_bicentenario.asp)
Acá va el
primer contraste y respondo a la pregunta que planteo anteriormente: ¿cuál es
el entrelineas que existe detrás
de esta obra? veamos:
Las imágenes hablan más que las palabras dicen
por ahí, la invitación es a que quien lea este blog saque sus propias
conclusiones y también los quiero exhortar para que no siempre se queden con un
solo lado de la historia, la historia de "la vuelta guayabal" está
contada a través de narraciones que le daban una connotación negativa a la
zona, sin embargo se ha constatado que la mayoría de familias habit-antes de
este sector son gente de bien y que lo único que tenían era ese predio
cuasi arrebatado que según reportaje.
Con esta me despido como se solía decir en esta Medellín casi gigante en tiempos atrás cuando la música de los tiples desbordaba en el aire.
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